50 días, 50 sueños...

"Levantarse con la luz de Dios, sentir ese cosquilleo en la piel cuando hay algo que amas..." El sentimiento de un cofrade acaba de empezar. Para algunos es todo el año, para otros comenzó con la primera salida procesional del año.
No hay nada más grande que mi Fe en Dios. "El Señor es mi Pastor, nada me falta" así respondemos los cristianos a la Fe, a la devoción. Nunca olvidar lo que hizo por nosotros, Jesús nuestro Salvador.

Para nosotros los cofrades es momento de felicidad y prosperidad, es el momento de acudir a la casa del Señor, a verle, a llorarle tus penas y rezarle.
Hoy el cartel  anunciador nos ha abierto de nuevo los ojos para revivir esos momentos que nunca se olvidan. 

Hay una pequeña conversación que recuerdo: 

      -Papá, ¿podemos ir al besamanos de la Virgen?.
(Pregunta el chico a su padre en la hermosa plaza de San Lorenzo) 

      -Ahora mismo hijo mío, como no íbamos a entrar.
(Cuando entran no pueden dejar de mirar a la hermosa Soledad)
(De repente el templo se cierra y se apaga, y el niño ilusionado admira como llevan a la Virgen al altar mayor. El niño no puede evitar que sus ojos se enjugen de lágrimas, late su corazón cada vez más fuerte, pelos de punta, ilusión máxima...) 

      -¡Qué suerte, qué hermosa es, gracias papá!
(Dice el niño ilusionado al sentir ese momento). 

Ya huele ha incienso, a Macarena, a canela y clavo. No puedes evitar poner en tu casa las marchas a tope, poner vídeos cofrades, leer revistas o boletines, quemar incienso, o salir como no "de capilleo". 

Se que lo estás deseando cofrade, así que hazlo no lo dudes. Son 50 días, 50 sueños, 50 suspiros... en los que te prometo Dios Padre y Madre mía, que nunca faltará ni una oración ni un beso cuando te vea...

Redacción: Pablo Rodríguez

Fotos: Pasión en Sevilla, el ABC de Sevilla